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In Latin music -- the realm of the troubadour, the serenade and the romantic -- few things separate more clearly the men from the boys (or, in this case, the women from the girls) than what an artist can do with just a voice and a guitar.

Last week at the MO Bar + Lounge inside the Mandarin Oriental Hotel in Miami, Spanish songstress Rosana transformed her guitar into an orchestra with her voice as the expressive conductor.

"I never know exactly what I'm going to sing any given night," Rosana told Billboard after the show, where she performed some of her greatest hits -- -songs of love, joy and optimism -- including "Sin Miedo" (Fearless) with guest Sie7e, the Puerto Rican singer/songwriter also signed to label Warner Music.

The intimate show is part of Warner Music Latino's partnership with Mandarin Hotels that earlier this year also brought Chilean rockers La Ley to the hotel lounge. While that show was fully plugged, Rosana's was fully acoustic.

The Spanish singer took the makeshift stage in front of some 200 people and sat on a comfy couch designed to look like a familiar living room, singing solo for nearly an hour before bringing Sie7e up for their upbeat duet. She ended her show like she ends all her performances: taking her mike and singing a cappella as she walked among audience members.

Not many acts can pull this sort of thing off. For Rosana, who's been relentlessly touring Spain and Latin America with her band, the easy banter goes hand in hand with her potent voice and rousing songs.

That she managed to make it sound new and wonderful -- yet again -- is a testament to the artistry.

 

La Cantante Española Rosana Deleita en un Concierto Íntimo en Miami

 

Por Leila Cobo. Traducción al español por Concepción A. Monje. 08 de septiembre de 2014

 

En la música latina – el reino del trovador, la serenata y lo romántico – pocas cosas diferencian más claramente a los hombres de los niños (o, en este caso, a las mujeres de las niñas) que aquello que un artista puede hacer tan solo con una voz y una guitarra.

 

La pasada semana en el MO Bar + Lounge, en el interior del Hotel Mandarín Oriental de Miami, la cantante española Rosana transformó su guitarra en una orquesta, con su voz como única maestra de ceremonias.

 “Nunca sé exactamente lo que voy a cantar cada noche”, dijo Rosana después de su actuación, en la que interpretó algunos de sus grandes éxitos – canciones de amor, de alegría y optimismo – como “Sin Miedo” junto a su invitado Sie7e, el cantante y compositor puertorriqueño que ha firmado también con Warner Music.

 

Estos conciertos íntimos forman parte del acuerdo que Warner Music Latino tiene con los Hoteles Mandarín y que acogió a principios de este año a los roqueros chilenos La Ley en el salón del hotel. A diferencia de este concierto, el de Rosana fue totalmente acústico.  

 

La cantante española tomó el escenario improvisado frente a unas 200 personas y se sentó en un sofá confortable diseñado para recrear una sala de estar familiar, cantando solos durante casi una hora antes de invitar al escenario a Sie7e para interpretar su dueto optimista. Terminó su actuación como termina todos sus conciertos: con micrófono en mano y cantando a capela mientras se pasea entre toda su audiencia. 

No muchas actuaciones pueden desembocar en esto. Para Rosana, que ha estado de gira inexorablemente por España y América Latina con su banda, la risa fresca va de la mano de su potente voz y sus conmovedoras canciones.

 

Que haya conseguido hacer que suene nuevo y extraordinario – una vez más – es un testimonio de arte. 

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